Compra calabazas en la Huerta de Pancha. No son excesivamente grandes, pero es así porque damos más prioridad al sabor que al tamaño. Puedes comprar nuestras calabazas de temporada, que llegan a tu mesa directas de la cosecha, sin pasar por refrigerados. Las mejores calabazas ecológicas son las de la Axarquía.
Características de las calabazas de Pancha
Las calabazas de Huerta de Pancha son de la variedad Butternut, tienen forma de cacahuete, o también se conocen como calabazas violín. Su peso oscila entre los 750 gramos y los 2 kg. Su piel es anaranjada, dura y fina en comparación con otras variedades de calabaza, pero más gruesa que otros frutos del mismo género, como el calabacín; al ser dura, debe pelarse con fuerza. Su pulpa es cremosa y dulce, con ligero toque de sabor a nueces, y en la que podemos encontrar una cavidad donde se alojan las pipas.
La pulpa de calabaza se puede comer en crudo (rayada o licuada), o cocinada (cocida, asada, al microondas o en la sartén). Son múltiples los platos que pueden elaborarse con esta hortaliza, como el cabello de ángel que se elabora en repostería.
Sus semillas se pueden tostar y salar, comer crudas o cocinarlas al vapor.
Tipos de calabazas que existen
Existen cuatro grandes grupos de calabazas. Dentro de ellas, hay una serie de variedades, pero vamos a hablar sobre todo de los grupos. Son la calabaza Pepo, la moschata, calabaza máxima y mixta.
La calabaza Pepo es naranja o verde, de tamaño pequeño o mediano. Es la típica calabaza que vemos durante los meses de octubre y noviembre, coincidiendo con la festividad de Halloween. Las variedades de calabazas Pepo son la curcubita máxima, Pepo espagueti, Patisson, kabocha o japonesa, bellota, cuello torcido y la calabaza rondín.
Las calabazas moschatas o moscadas son de color dorado o anaranjado, y su tamaño es mediano. Su forma no es redondeada, sino más bien oblonga. Se caracterizan por su dulzor. Las calabazas moscadas más típicas son la Butternut, Tamalayote, de Provenza y Loche.
En cuanto a la variedad de calabazas máximas, su color es amarillo, pero también puede ser azul o azul-verdoso. Las hay de todos los tamaños, y su pulpa es la más amarga. Estas variedades son la Banana, Hubbard, Gigante, Jarrahdale o Aladino.
Por último, las calabazas mixtas pueden ser de varios colores, y no son muy grandes. En este caso, no solo se utilizan para comer, sino sobre todo con una función decorativa.
Cómo recibirás la calabaza de la Huerta de Pancha
Nuestra calabaza se recolecta en su punto más óptimo. Este punto no es igual al de maduración. Para el empaquetado, aunque no es un producto frágil, intentamos protegerla de daños durante el transporte. La calabaza se recibe a domicilio lista para consumir.
Nuestras calabazas conservan todo su frescor y sabor natural debido a que no pasan por cámaras de frío. Son una auténtica delicia.
Cultivos de calabazas en nuestra Huerta
La calabaza es una planta anual rastrera, que tiene tallos muy largos cubiertos de pelo áspero. Esos tallos pueden llegar a alcanzar los 10 metros de longitud. Sus hojas son lobuladas y acorazonadas, y sus flores, grandes y bonitas, con pétalos amarillos o blancos.
Para que su cultivo sea óptimo, es necesario contar con gran cantidad de luz diaria y una temperatura de entre 20 y 25ºC. Es conveniente remover el suelo, para evitar así la aparición de malas hierbas.
Esta calabaza necesita gran cantidad de agua para su desarrollo vegetativo; el riego debe ser frecuente y regular. Además, tenemos cuidado de encontrar el punto medio en el que no les falte agua pero tampoco se encharque el suelo y se pudran las raíces.
Es imprescindible la poda de la planta, eliminando ramificaciones secundarias.
La cosecha se realiza cortando unos 5 centímetros de tallo en lugar de arrancarlas directamente de la planta. La cosecha se hace unos seis meses después de la siembra, consiguiendo las mejores calabazas de la Axarquía.
¿Qué beneficios tiene comer calabaza?
Las propiedades de la calabaza son innumerables. Contribuye al buen estado de la piel, los huesos y los dientes, así como del sistema nervioso y el aparato digestivo.
Su componente principal es el agua, lo que unido a su bajo contenido en hidratos de carbono y su nula cantidad de grasa, hacen que sea un alimento de bajo aporte calórico y muy saciante.
Las calabazas son altas en fibra, en vitaminas A, C y E, y varias vitaminas del grupo B.
Esta hortaliza también es rica en minerales, entre los que destaca el potasio, y en aminoácidos.
Beneficios de las semillas de calabaza
Las pepitas o semillas de calabaza merecen una mención especial, ya que constituyen en sí mismas un superalimento con importantes propiedades nutritivas. Tienen un sabor suave, ligeramente dulzón, y podemos comerlas crudas, secas y tostadas. Son ricas en magnesio, un mineral fundamental para la buena salud del intestino, el corazón, los dientes y los huesos, además de regular la presión arterial; también está muy presente el zinc, que refuerza el sistema inmunológico y regula el estado de ánimo.
Las semillas de calabaza contienen triptófano, que favorece a la regulación del sueño. También contienen ácidos grasos Omega 3 y 6, y tienen un fuerte poder antiinflamatorio.
¿Cómo se come la calabaza?
La pulpa de la calabaza se puede comer en crudo, principalmente rallada como una zanahoria o licuada para hacer zumo. Tradicionalmente se consume principalmente cocinada, puede ser cocida, asada, al microondas e incluso en la sartén. Se emplea en numerosas preparaciones culinarias: en crema, sopas, caldos, purés, al horno, al vapor, hervida, salteada, rehogada, gratinada, como complemento de estofados, como guarnición, en tartas, pasteles, flanes, sobre la pizza, etc. También se usa para preparar confituras, arropes o mermeladas. El cabello de ángel con el que se rellenan dulces y pasteles se elabora con la variedad confitera.
Las semillas de calabaza se pueden tostar y salar, pero entonces parte de los aceites que contienen se dañan. También se pueden comer crudas o cocinar al vapor junto a la pulpa y después comerlas pelándose con los dientes, De esta manera conservan mejor todas sus propiedades.
¿Cómo se corta la calabaza?
Cuando ves la forma de la calabaza parece imposible cortarla y quitarle la piel, pero te vamos a explicar paso a paso una manera fácil de cortarla para que puedas hacerlo sin problema.
Antes de nada, es necesario tener un cuchillo cebollero o de chef bien afilado y de calidad decente porque tienen la piel muy dura.
Los dedos que sujetan la calabaza tienen que estar flexionados antes de realizar el corte, en un ángulo de 45 grados y apoyando los nudillos en la hoja del cuchillo. Con esto conseguirás no cortarte.
Ahora vamos a proceder a cortar la calabaza. El primer paso es cortar los dos extremos (la parte del tallo y la base) a modo de rodaja.
Después vamos a cortarla por la mitad. Un truco para que te resulte más fácil es pasar el cuchillo, marcando todo el contorno y después, apoyar la palma encima del cuchillo y hacer fuerza hacia abajo.
Podemos utilizar una cuchara o unas tijeras para vaciar las semillas que hay en su interior. Ahora, ponemos cada una de las piezas con las bases mirando hacia arriba y vamos pelando de arriba hacia abajo, quitándole la cáscara externa. Y voilà, ¡ya la tenemos pelada!
La podemos cortar en forma de rodajas, láminas, bastones, cuadraditos pequeños o en trozos.
¿Qué sabor tiene la calabaza?
El sabor de la calabaza es dulce y suave, similar al de la zanahoria. Es un poco terrosa y puede tener notas ligeramente amargas, dependiendo de la variedad.
¿Cómo conservar la calabaza?
La mejor forma de conservar una calabaza que no se va a consumir a corto plazo es congelándola. La calabaza se puede congelar cruda o cocinada, pero en ambos casos debes pelarla para congelarla. No olvides que cuando la hayas congelado, podrás utilizarla dentro de los seis meses siguientes a su congelación.
¿Cómo saber si una calabaza es buena?
Se pueden seguir una serie de pasos para comprobar si una calabaza es buena.
Una calabaza fresca y de buena calidad debe ser más pesada de lo que parece. Si es más ligera, puede estar pasada.
La piel de la calabaza debe ser firme y lisa, sin manchas ni arrugas. Evita las calabazas con golpes o magulladuras, ya que pueden indicar daños internos.
El color de la calabaza puede variar según la variedad, pero en general debe tener un color uniforme y vibrante. Evita las calabazas con manchas o decoloraciones.
El tallo de la calabaza debe estar intacto y seco. Si el tallo está verde o húmedo, puede significar que no está madura o ha sido almacenada incorrectamente.
¿Cuánto tiempo puede durar una calabaza?
Una calabaza puede durar hasta varios meses si se almacena adecuadamente. En condiciones óptimas, es decir, en un lugar fresco y seco, una calabaza puede durar de 2 a 3 meses. Sin embargo, una vez que se corta o se abre, su vida útil se reduce considerablemente, y debe consumirse en unos pocos días.
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